lunes, 7 de marzo de 2011

CARTA A FENG ZHIYING



No sé nada del amor y confieso que quizás apenas
haya metido mis pies en su amplio y confuso reino.
como tú sabrás, mujer, enamorado estuve de las tardes,
las tardes en oriente son indispensables para los hombres
y yo, venido de otras latitudes recuerdo esos paseos
longitudinales en bicicleta.
En esa tierra he visto los límites de la curvatura terrestre,
llegué con el amor en hombros pero el tiempo