Yo de niño soñaba con una
princesa,
una princesa que salía
de los cañaverales,
una princesa tropical
que bailaba con el viento.
Había noches que no dormía
pensando que ella vendría
desde el sol y me
guiaría a la iglesia entre el aguacero.
Yo soñaba con una hacienda
en el Paraíso y
con el amor corriendo sobre el
río.
Uno de niño piensa que el
tiempo es más que el infinito.
Aún sueño con ella ,
con su nombre fuerte,
escrito desde un valle,
Iniciando el alfabeto.
Yo de niño soñaba con una
princesa
tomándome las manos,
limpiando mi alma, rescatándome
de la tristeza.
El tiempo es apenas perceptible, simplemente todo es juego y el juego es suficiente. Alegoría de la belleza tomándonos de la mano; pero toda belleza pide un rescate, quiere un tributo por traernos de vuelta, a salvo de su mirada.
ResponderEliminarEl gran Julio Fabian Salvador.
ResponderEliminarCientífico Poeta ahora lo siento como el "Poeta de Soledad". Que sueña por encontrar a su amada princesa de Palmira.